HAMLET EN UNA HARLEY

Les quería comentar primero que como algunos sabrán, el señor Blogger anda caprichoso una vez más, así que ahora se le ha dado por no permitir dejar comentarios en algunos blogs, no sé si esto le ocurre a mucha gente. En algunos no tengo mayor problema, y en otros, en los que aparezco como no identificada, dejo el comentario como si fuera un anónimo, pero en uno que otro me resulta imposible. Mil disculpas por ello, y espero que pronto volvamos a la normalidad.

Bueno, respecto al título, ustedes se preguntarán de qué va, y es nada más y nada menos de una serie que veo hace un tiempo y que me encanta; por algún motivo u otro siempre olvidaba comentarles de ella, y eso está muy mal, porque vale la pena verla.

Sons of Anarchy es una serie estadounidense que trata de un club de motociclistas, llamado SAMCRO, que viven en un pueblo ficticio de California y se dedican entre otras perlas, al tráfico de armas, soborno, y extorsión; todo ello mientras intentan mantener la paz en Charming, el pueblo. Lo anterior sonará un poco contradictorio, que como es posible que semejantes personas se preocupen por la gente a su alrededor. Pues bueno, creo que de eso se trata la serie, de que nada es lo que parece, y la vida es gris, muy gris, y en ningún lugar lo es más que en Charming.

El protagonista es Jax Teller, interpretado por el conocido de algunas, Charlie Hunnam, como vicepresidente del club, ya que su fallecido padre fue el fundador junto a su mejor amigo, Clay Murrow, en manos de Ron Perlman, que a su vez está casado con su madre, Gemma. Así que tenemos a Clay como presidente del club, en una democracia un poco extraña, pero democracia al fin, con Jax como futuro sucesor, y una omnipresente Gemma Teller que se ubica en el papel de matriarca.

En teoría, ni siquiera debería ver esta serie, porque a mi no me gustan los clubs de motociclistas o la violencia, pero esta es la clase de producto muy bien hecho que te engancha a la primera mirada. Aquí no hay delicadezas ni se esconde nada; las cosas son como son, como la vida misma, para bien o mal.

La lealtad en el club es el pilar del mismo, así como la obediencia a sus normas. Si traicionas a tus hermanos, porque así se consideran ellos, mejor date por muerto.

Aparte de un guión espectacular que te mantiene con los nervios de punta, están los personajes extraordinarios que el creador, Kurt Sutter, nos ha regalado.

Jax es noble, idealista, pero tan peligroso como el que más, y cree que a futuro, cuando él sea la cabeza del club, podrá cambiar las cosas con las que no está del todo de acuerdo, pero hasta entonces muestra una lealtad a prueba de balas.

Clay es un personaje que puede no gustarte a primera mirada, demasiado radical y cabezota, pero es noble, y daría una mano por cualquiera de sus hermanos, o por su mujer, Gemma.

Y aquí llegamos a mi personaje favorito de la serie, Gemma Teller, interpretado por Katey Sagal, una mujer con tales agallas que si no le tuviera tanto miedo, querría que fuera mi amiga. Esta mujer con mayúsculas es capaz de cualquier cosa por mantener el club unido, es manipuladora, pero también una madre y esposa amorosa. Sufre las experiencias más terribles y apenas si pestañea, porque sabe que es el pilar sobre el cual se apoyan sus hombres.

Pasan tantas cosas que si las cuento no tendría gracia, así que de la trama no digo más; pero puedo contarles que aún cuando esta serie no es muy conocida, es admirada como una de culto por los conocedores. La violencia y el tratar los hechos de la vida sin sutilezas le ha conseguido ser vista por encima del hombro por algunos, pero aún así, es una de las más vistas.

En cuanto a Hamlet, que no me he olvidado, el paralelismo es grande y el mismo Sutter ha confirmado que se inspiró en parte en la historia de Shakespeare para crear la serie. Clay es como el Rey Claudio, casado con Gemma, que vendría a ser la Reina Gertrude; y algo más, se sugiere que ambos tuvieron algo que ver con la muerte del primer esposo de Gemma desde el inicio. El idealista Jax sería un Hamlet moderno. Y el entorno en sí se presta para sacar muchas conclusiones.

Stephen King, aquel autor que saca libros de terror para destrozarnos los nervios cada cierto tiempo, es un fiel seguidor e hizo un cameo en un episodio. Cosa rara ver a un autor vestido de semejante manera.

En los últimos Globos de Oro, reconocieron a Katey Sagal con el galardón a Mejor Actriz, y más les valía, porque no premiar su trabajo hubiera sido un crimen.

Se dice que Quentin Tarantino es un fan y esperan que se anime a participar un día de estos, quizá en la temporada que estrenarán en Setiembre.

Esta será la cuarta, y cada una no consta de muchos episodios, así que si se animan, estoy segura de que no se arrepentirán, es una serie que atrapa y conmueve.

Les dejo un video para tentarles un poco más; que tengan un lindo fin de semana.