Me comentaban algunas personas en la entrada anterior que es un poco triste pensar en que sea necesario celebrar un Día del Libro para rendirle todos los honores que se merece, y estoy totalmente de acuerdo. Los libros son nuestros amigos, están a nuestro lado cada día, en los momentos difíciles, en los alegres, nos llevan de viaje a lugares que de otra forma nunca podríamos visitar, y le ponen esa cuota de magia a la vida que tanto necesitamos.
Hace poco me mostraron este cortometraje que estuvo nominado a los premios Oscar de este año, y me quedé enamorada de él, es una joya. El video nos narra, casi sin sonido, la historia de un escritor, su amor por los libros, y como estos, según nos da a entender la obra, nos devuelven todo ese amor que reciben. Aunque se pase del color a la oscuridad, ellos se abren paso y llegan... ¿volando? Puede ser, ¿por qué no? Les decía que son mágicos y tienen vida propia, y son tan generosos que la comparten con nosotros.
Es cortísimo, apenas quince minutos que se pasan en un suspiro, y se los recomiendo mucho; no cuento más para no estropear el final, pero espero que puedan darse un momento cuando estén libres para verlo, no tiene desperdicio. Que lo disfruten.