Cuando me hablaron de esta serie, también pensé que era una broma, o el argumento más absurdo que se le pudo ocurrir a alguien, pero no es el caso, no con una producción tan buena como esta.
La serie es inglesa, a cargo de la BBC, y conozco a muy pocas personas que la hayan visto. Es natural, supongo, con todas las que llegan de USA, pero a veces dejamos pasar algunas muy buenas por su falta de publicidad.
Being Human trata de un vampiro, Mitchell, que tiene por mejor amigo a George, un buen muchacho con un coeficiente intelectual muy alto y una personalidad adorable; sólo tiene un ligero problema, y es que también es un hombre lobo. Cuando se conocieron, en lugar de tratarse como los enemigos naturales que son, se convirtieron en muy buenos amigos. Ambos trabajan en un hospital como bedeles, intentando mezclarse con los humanos y llevar una vida normal, lo que por supuesto, les resulta prácticamente imposible. Mitchell puede andar a la luz del sol, lo que no hace que pierda su encanto como vampiro, por cierto, y sólo para aclarar desde ya, no brilla; sin embargo, como es lógico, por más que lo intenta, no puede evitar su deseo por sangre humana. George, en cambio, tiene la "suerte" de transformarse una vez al mes, y debe siempre con la ayuda de Mitchell buscar un lugar dónde pasar la noche, pues como hombre lobo se desconoce totalmente; aparte de eso, es el que más se esfuerza por ignorar su situación y llevar una vida normal. Es justamente este deseo de vivir como jóvenes comunes y corrientes lo que los lleva a decidir buscar un departamento, escogiendo precisamente uno que tiene mala fama por estar supuestamente embrujado. Y lo está, en realidad, ya que allí habita Annie, su última dueña, una joven que se mudó allí con su prometido y murió en el momento más feliz de su vida; es por ello por lo que supuestamente permanece allí y no pasa "al otro lado". Ella acostumbra espantar a las personas que rentan el lugar, ya que lo considera suyo, pero cuando Mitchell y George llegan a vivir allí, al saber que también son "diferentes", decide aceptarlos, tanto como ellos a ella, y comienzan una extraña convivencia.
Me he explayado con el argumento, pero no he podido contenerme, y eso que no hay spoilers. La serie me ha enamorado a la primera mirada porque es fresca, honesta, y lo más importante, humana, de allí el nombre. Los protagonistas luchan por encajar en la sociedad, especialmente George, a pesar de las advertencias de Mitchell de que no pueden ir contra lo que son; en cuanto a Annie, sufre por su prometido y se aferra a las costumbres de cuando estaba viva. Esta es una comedia de humor negro con muchos tintes de drama que llega sí o sí al corazón de una persona. No hay grandes efectos visuales, a excepción de las transformaciones de George, porque están más enfocados en los diálogos, las situaciones que deben vivir estos tres, y como resulta siendo su amistad tan importante para mantenerse firmes en la vida diaria.
Es enternecedora la conexión entre ellos, cómo se dan la mano para salvarse, yendo contra todo, y cuando no están metidos en problemas, sus conversaciones son hilarantes. Por mencionar una de sus épicas discusiones, me ganaron totalmente cuando se pusieron a debatir acerca de a qué Casa de Hogwarts los enviarían, cómo no quererlos.
Bueno, en conclusión, muy recomendable. Tiene apenas dos temporadas de seis capítulos cada una y se van por la tercera, además de que la calidad de las producciones de la BBC ya es conocida.
Dejo uno de los trailers para que se den una idea.